Ser tu propio jefe




En algún momento de nuestra vida, a casi todas se nos ha ocurrido la idea de tener nuestro propio negocio: no aguanto al jefe, mi trabajo no esta reconocido, no me pagan con arreglo a lo que hago... Ahora, en el paro, con mucha más razón.

Personalmente creo que no es una mala idea, y única solución para muchos de los casos en los que, volver a la vida laboral, parece ya casi imposible. Pero todo ha de hacerse siguiendo unas pautas, y lleva su tiempo. ¿Uno no decide comprarse la primera casa que ve o pedir un crédito en el primer banco donde pregunta condiciones, no?, pues esto es lo mismo. Hay que tener ideas claras, barajar opciones, buscar financiación... Hoy en día las posibilidades son enormes pues la idea de negocio ya no implica un local, un sitio físico donde ubicarlo. Las nuevas tecnologías nos permiten un nuevo campo de posibilidades con los negocios por Internet. 

Sea como fuere, antes de todo ello hay que tener algunos conceptos claros y sopesar pros y contras de cada opción. ¿Empezamos?




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